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sábado, 2 de noviembre de 2013

LibriVox renovado

LibriVox, la mayor biblioteca del mundo de Audiolibros de Dominio Público de acceso libre, ha renovado recientemente su portal web, mejorando y haciendo más eficiente el acceso por parte del público a su catálogo. Entre las mejoras introducidas se encuentra la de fácilmente buscar contenidos por Autor, Título, Género o Temática e Idioma.

Esta renovación ha sido posible gracias a las donaciones que LibriVox recibe del público y a la ayuda de la Fundación Andrew W. Mellon.

Para quien aun no conozca LibriVox nada mejor que definirlo con los objetivos que se marca:

"Hacer disponibles en internet de forma gratuita todos los libros de dominio público en formato de audio"

LibriVox fue fundado por Hugh McGuire en 2005 bajo la siguiente cuestión que planteaba públicamente: ¿Puede la red acoger un grupo de voluntarios que ayuden a llevar los libros de dominio público a la vida a través de podcasts?. El resto es historia que se está haciendo ahora mismo.

Y para cumplir con su cometido ¿con qué medios cuentan? Por un lado con el material primigenio, los libros de dominio público, para lo que reciben la ayuda del Proyecto Gutemberg y del Internet Archive, que aloja los archivos de audio sin coste para LibriVox. Y además realiza campañas de financiación que les permiten obtener fondos para cubrir los costes que conlleva el mantenimiento de un sitio como este (pagar alojamiento de servidores, administradores de sistemas, etc.)

Pero el principal apoyo que tienen es el de los miles de voluntarios que se encargan de su dirección y especialmente de la realización de los Audiolibros, ya sea en solitario o en un proyecto colaborativo.

Para hacernos una idea de la importancia del proyecto, sólo mostrar algunas cifras: en el momento de realización de esta entrada LibriVox contaba con 7136 entradas de catálogo, de las que en lengua no inglesa, 34 lenguas distintas, eran 998. La cantidad de lectores era de 6037.

Una de las políticas de LibriVox es la de publicar cualquier trabajo que tenga la mínima calidad de forma: que sea entendible y fiel la la obra original. Esto hace que entren en el catálogo obras que tienen inperfecciones como audio de baja calidad, con ruidos, acentos no del todo correctos u otros defectos. Este hecho a veces suscita críticas en los foros del sitio web sobre la imagen de poca calidad o de usuarios insatisfechos. Pero en mi opinión uno debe ser consciente de lo que tiene a su alcance y valorarlo. De igual forma que el fútbol aficionado tiene miles de practicantes y su público todos los dias y nadie espera en principio ver el mismo nivel que cuando va a un estadio de un equipo profesional,en LibriVox podemos encontar muchos niveles de producción distintos, pero tiene mucho valor para el mundo de los audiolibros que exista esta "cantera" de lectores, de público y de fondo de catálogo.

Recomiendo que os paseis por su sitio y disfruteis de las grabaciones con la mente abierta.

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