Como bien sabeis Amazon adquirió Audible hace ya algún tiempo y desde entonces se convirtió en la mayor, con diferencia, tienda de audiolibros digital del mundo, la que tiene mayor penetración del mercado y al que experimenta mayores crecimientos (33% en el 2012).
Y ello se fundamenta no sólo en las funcionalidades que ofrece en su producto (como hemos visto varias veces, muy integrado con Kindle) sino principalmente en su enorme catálogo que se alimenta de distintas editoriales (ya hablaremos en otro momento de su relación con ellas, en cierto modo perversa), de la adquisición de catálogos de otras empresas (como vimos hace unos meses cuando adquirió el de la extinta AudioGo) y, hecho muy relevante, de la alimentación de un entorno de lo que hemos llamado Audiolibros 2.0 como es ACX.
Con esto vemos que el tremendo catálogo de audiolibros les permite tener una oferta para todos los públicos y todos los gustos que sobrepasa los 26.000 títulos y al que añade cerca de 1000 al mes, y además tener una gran cantidad de clientes (no queremos decir que sus clientes lo sean solo por el catálogo, obviamente la tracción de Kindle y otros aspectos ayudan a que su base de clientes sea muy amplia).
Y por tanto se aprecia cómo la estrategia de vender con un precio ajustado permite a Amazon obtener beneficios: vendiendo mucho, mucho mucho. En la primera parte de la frase se esconde, aunque en principio no pudiera apreciarse, un hecho que es el germen de la actual disputa entre Amazon y Hachette, y es que Amazon intenta por todos los medios bajar y ajustar los precios con fin de tener una mejor posición ante su competencia e incluso dejarlos fuera del juego.
ACX
¿Qué posición tiene en este tablero de ajedrez ACX? ¿Por qué mantiene y alimenta Amazon (desde Audible) este entorno de creación de Audiolibros? La razón no se esconde, es la de proveer un entorno de creación de audiolibros con el intercambio de cada una de las labores del oficio, desde el autor que provee las obras y que busca quien pueda crear el audiolibro correspondiente, los ingenieros de sonido y los estudios que deciden crear el audiolibro de tal o cual autor y los actores que proveen sus voces e interpretación. Y mediante este entorno se ponen en contacto y trabajan todas las partes necesarias en la elaboración de un audiolibro para permitir que Audible te los lleve hasta tu smartphone (Audible y solo Audible o donde sólo Audible puede publicar, es decir iTunes).Pero en mi opinión hay otra razón que no está tan explicitada, y que a la vez está latente para cuando Amazón tenga que hacer uso de ella. Y es que con este medio Amazon puede presionar a las editoriales de audiolibros para que cumplan con las condiciones que les exijan: si tu, editorial X, no quieres proveerme los audiolibros al precio Y que yo quiero, no te preocupes que ya tengo aquí una legión de productores 2.0 que lo van a hacer encantados. Y he aquí el por que ACX es una pieza estratégica para Amazon-Audible.
Ahora mismo en España, debido al estado incipiente en que está la industria del audiolibro aun sólo podemos ver esto desde la barrera, porque además si no vives en EE.UU. o el Reino Unido no puedes entrar a formar parte de ACX, y a la vez Audible aun no es una gigantesca amenaza para las empresas que se dedican a la procelosa aventura de la distribución de audiolibros en España o Latinoamérica. Pero sin duda estas empresas miran como a una espada de Damocles al gigante minorista.
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