Durante estas últimas semanas nos hemos podido encontrar con diversos artículos, entradas de blog etc. con titulares que promulgaban que los audiolibros en España no tienen (y por el tono de alguno de ellos, ni tendrán) el éxito que tienen en otros lugares.
Como bien sabeis quienes seguis este blog, hace poco comentamos otro artículo que aparecía en la prensa digital, este directamente sentenciando a la desaparición a los audiolibros en España. En aquel caso se esgrimian una serie de argumentos que en el comentario creo que rebatíamos con éxito.
En estos nuevos artículos más bien se preguntan por la razón del poco éxito de este formato en España. (Por cierto, la referencia a dos de los artículos a los que me refiero, al final de esta entrada).
Y hay dos razones que se repiten una y otra vez: la falta de apoyo a los audiolibros por parte de las grandes editoriales y la dificultad de encontrar estos en las librerías.
Si bien es cierto que estos dos factores hacen que el éxito de los audiolibros se vea frenado actualmente, creo que son dos factores puramente temporales y que acabarán dejando de tener importancia en este hecho. No porque desaparezcan los factores en si, si no porque dejen de tener importancia.
Me explico uno por uno.
Por un lado, sobre la falta de apoyo de las grandes editoriales a los audiolibros. Bueno, lo primero que hay que asumir es que a dia de hoy el mercado de los audiolibros es básicamente digital. No quiero decir que los audiolibros solo sean digitales hoy, pero creo que a nadie se le escapa que mucho porcentaje ya lo es y el futuro va por ese camino.
Con esta premisa, y teniendo en cuenta que las grandes editoriales en España viven en un mundo del pasado donde aquello que no pueda medirse en resmas de papel es algo que está lejos de su entendimiento, dificilmente vamos a ver a estas editoriales apoyando en serio ningun negocio digital, ni los audiolibros ni los eBooks ni ninguna otra cosa. Este creo que es un punto clave ya que hace que nada digital sea posible en estos entornos. Como ya he visto en otras situaciones, no puedes imaginar una figura geomérica en tres dimensiones si tu mundo es de dos dimensiones (acordaos del capítulo de los Simpson en el que Homer se trasladaba a un mundo tridimensional)
Además para estas editoras, aparte de no entender los nuevos modelos, las nuevas necesidades, la desaparición de otras (como almacenaje, transportes, etc.), con "lo digital" siempre ha estado el fantasma de "la piratería" y esto les ha mantendo aun más paralizados.
Añadir a esto un statu quo lleno de intereses creados y negocios aledaños a los que no interesa el cambio (lógicamente). Desde los pepeleros, hasta la justificación del lanzamiento todos los años de nuevas versiones de lo mismo que si no estuvieran en material sería por lo menos dificil de justificar su coste/precio.
Por otro lado tenemos la falta de presencia de los audiolibros en las librerías. Este es un factor que claramente dificulta el acceso de los usuarios a los audiolibros, y lo primero al conocimiento de su existencia como posibilidad de acceso a las obras literarias y de entretenimiento. Hasta tal punto es así que personalmente cuando hablo con muchos de mis conocidos sobre los audiolibros, aunque más o menos saben lo que es, la gran mayoría no ha oido ni visto uno en su vida.
Pero este de nuevo es un factor de tiempos pasados y tenderá a eliminar su importancia. Como bien sabeis quienes nos seguís de forma habitual, nosotros apostamos de nuevo por una distribución digital. Y parece que en ese sentido no estamos solos. El futuro de los audiolibros, de los eBooks, de la música y en general de los medios digitales pasa por una distribución también digital, acorde a las necesidades y hábitos de los usuarios.
Pero no solo eso. La distribución física, material, de los contenidos (sean estos libros en papel o DVDs con audiolibros) tiene un coste tremendo, solo al alcance de empresas enormes. Este coste es tanto de la distribución física (fabricación, almacenaje, transporte, exposición...) como de los medios de negociación para lograr que tu audiolibro sencillamente esté presente en un escaparate. De nuevo al alcance de pocas empresas y desde luego ninguna pequeña. Debido a la evolución del mercado y a los usos que el público está tomando en torno a la adquisición de bienes digitales, este esfuerzo a la par que titánico, me parece inutil, sobre todo si hablamos de empresas pequeñas que tienen que tener mucho cuidado en como invierten sus recursos.
Obviamente las empresas tradicionales dicen que la dificultad de distribución física es un impedimento para el éxito de los audiolibros ... claro, en su mundo. Pero "el mundo está cambiando".
Un punto importante que no debemos olvidar es la unión que hay entre estos dos factores. Las mismas empresas que no apuestan por los audiolibros son las que controlan que se pone o deja de poner en las estanterías de las librerías, especialmente en las grandes. 1 + 1.
Y por estas razones son por las que creo que muy al contrario que lo que aducen los artículos a los que hago referencia, los audiolibros están preparados para el futuro inminente y que en este futuro tendrán en España el éxito que ya tienen en otros lugares (y de ahí el título del post).
Para finalizar, quiero referir un artículo aparecido esta misma semana pasada en Madri+D en el cual se habla sobre el grandísimo riesgo que corren los medios tradicionales de perder no sólo esta revolución digital de la que hablo a lo largo de este artículo y que, tengámoslo en cuenta es la ola pasada, también la siguiente que ya está en marcha y que es la revolución digital móvil.
http://www.todoereaders.com/por-que-los-audiolibros-triunfan-en-espana-y-otros-paises-del-mundo.html?utm_source=rss&utm_medium=rss&utm_campaign=por-que-los-audiolibros-triunfan-en-espana-y-otros-paises-del-mundo
http://www.que-leer.com/23101/los-audiolibros-en-espana-no-acaban-de-sonar.html
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